Carta de nuestro Consultor Británico
Apreciadas familias:
Como seguimiento del informe de inspección positivo del último trimestre, y la reciente autorización del centro educativo, la Dirección del colegio me ha pedido que os proporcione mi resumen de los estándares y logros del mismo. Me encuentro en una posición favorable para ofrecer un juicio informado, ya que he estado trabajando con el colegio como Consultor Senior desde que Miss Gemma Izquierdo decidió optar por el Sistema Educativo Británico. Soy Co-fundador del sistema de inspección NABSS y también fundador educativo de ocho colegios británicos en España.
Lo que más me llama la atención de St. Patrick’s International School es la ilusón y alegría de aprender de los alumnos/as. Vayas donde vayas en la escuela, tanto los/as alumnos/as como los/as profesores/as se divierten, están motivados y entusiasmados. Las instituciones educativas no deberían ser fábricas que simplemente empaquetan el aprendizaje y producen resultados académicos. Deben ser lugares donde haya emoción en el aire, la emoción de la creatividad, el descubrimiento y la experimentación. St. Patrick’s International School tiene esa atmósfera, la respiras cuando entras en la escuela. El aprendizaje exitoso también implica trabajo duro y rigor, pero sin este ingrediente especial no tendrá un impacto completo y duradero.
Mientras paseas por el colegio, escuchas constantemente a los/as alumnos/as hablar con un alto nivel de inglés, lo cual es sobresaliente.
Los/as alumnos/as de St. Patrick’s International School también se benefician del amplio plan de estudios con las oportunidades que se brindan para aprender otras materias y el fuerte énfasis en las artes. En demasiadas escuelas hoy en día las matemáticas y las ciencias dominan el plan de estudios en detrimento de las artes y las humanidades. Los/as alumnos/as necesitan adquirir conocimientos y habilidades en una amplia gama de materias, aprender a pensar tanto de forma crítica como creativa y comunicar sus ideas y opiniones a los demás de forma elegante y convincente. La escuela está logrando este equilibrio correctamente.
Sobre todo, los colegios deben ayudar a sus alumnos/as a convertirse en personas decentes, sensibles, que tengan confianza y autoestima, así como un profundo compromiso de ayudar a los demás. Esto me lleva a centrarme en lo que probablemente sea la mayor fortaleza de la escuela: la gran atención que se presta al desarrollo personal, social y emocional de los/as alumnos/as. En todos los pasillos y aulas, se ven alumnos/as felices y relajados/as. Quieren venir al colegio y tienen muchas ganas de aprender. Fundamentalmente, los/as profesores/as y el personal de apoyo se preocupan por los/as alumnos/as e inculcan valores sólidos.
Todos estos atributos proporcionan la base para un colegio exitoso. Estos logros iniciales ayudarán a garantizar un progreso rápido.